Suelos
El territorio municipal cuenta con una gama variada de suelos, que va desde los más drenados de los planos aluviales de los grandes ríos y sus tributarios hasta aquellos con drenaje excesivo de las superficies de denudación, de origen ígneo metamórfico sedimentario o de las estructuras rocosas. Posee texturas finas y medias, pero para nuestro caso lo más predominante son las arenas. Desde el punto de vista del relieve hay suelos completamente planos, plano cóncavos, ondulados y quebrados; su grado de desarrollo es muy heterogéneo, encontrándose desde muy evolucionados hasta los de escaso desarrollo como sucede en los paisajes de origen aluvial en los depósitos arenosos del Departamento.
El suelo está constituido por materiales minerales y orgánicos importantes para sostenimiento de la vegetación, su pobreza en elementos minerales se manifiesta por el alto grado de acidez, la baja saturación de bases, la ausencia de calcio, magnesio y potasio intercambiables, la significativa pobreza de fósforo aprovechable y los altos contenidos de aluminio intercambiable. La arcilla predominante es la caolinita y presentan una notable deficiencia de materia orgánica. La situación descrita anteriormente indica que la nutrición vegetal depende principalmente de la fase orgánica del suelo, estableciéndose un ciclo directo de nutrientes, en tal forma que las plantas obtienen su alimento de la capa hojarasca y otros residuos orgánicos en descomposición a través de raíces alimentadoras y hongos de micorriza.
Hidrografía
Los ríos y caños que nacen dentro del área Amazónica, en general se caracterizan porque sus aguas presentan coloración oscura, por lo que se les conoce con el nombre genérico de "Ríos Negros". Estudios realizados sobre estas corrientes fluviales indican que la coloración de las aguas se debe a la presencia de ácidos húmicos en solución, derivados de la descomposición incompleta de materia orgánica. El territorio del municipio de Inírida está bañado por tres grandes ríos: El Inírida, el Atabapo y el Guaviare. Cada uno de ellos presenta características específicas en sus cuencas que denotan ampliamente sus diferencias. Al río Inírida llegan dos caños de gran importancia, Caño Guaribén y Caño Bocón. Los ríos Guaviare, Inírida y Atabapo corresponden a la cuenca del río Orinoco.
El río Guaviare es el límite natural entre los Llanos y la Selva Amazónica, nace en el Macizo de Sumapaz (Cordillera Oriental), cuya cabecera está formada por los ríos Ariari, Duda y Guayabero; tiene una longitud de 1.350 km, de los cuales en su totalidad son navegables y su caudal a la altura de Mapiripana se estima en 15.000 m³/seg. (MINAGRICULTURA, INDERENA, 1983). Su principal afluente es el río Inírida. La subcuenca del río arrastra sedimentos y nutrientes que al desbordarse en épocas de aguas altas inunda y fertiliza sus riberas aledañas, por lo tanto esta unidad biológica mantiene una alta productividad en sus aguas y en sus suelos, siendo este uno de los fenómenos que está marcando la expansión del proceso del oriente colombiano.
El río Inírida nace en la Serranía de Tuhaní, Departamento del Guaviare, a 200 msnm, con una longitud de 1.300 km, de los cuales 1.000 son navegables para embarcaciones de pequeño calado, presenta cachiveras y raudales en la parte media y alta; su área de desborde está limitada porque se encuentra más encañonado su curso. Éste es el río interior del departamento y tiene la ventaja de confluir en el vértice de Inírida con los ríos Guaviare, Atabapo y Orinoco conformando una hoya de 125.000 km²; es el único medio de transporte de la población nativa y ordena asentamientos poblacionales a lo largo de su cauce. Este río se caracteriza por ser de aguas negras, lo que lo distingue por una alta diversidad, pero poca biomasa de organismos hidrobiológicos.
En la jurisdicción del casco urbano del municipio de Inírida se encuentran las micro cuencas de Caño Ramón con dos gregarios caño Juanita y caño Conejo; Caño Coco formado por caño Pola, caño Guamal y caño Matadero; Caño Motobomba con caño Terpél y caño Bollo y caño Limonar, los cuales se encuentran bajo la influencia de asentamientos humanos lo que incide en los altos índices de contaminación de sus aguas por residuos sólidos urbanos y aguas negras. En el área de influencia del basurero se encuentran los caños Pola y Juanita, todos estos tributarios del rió Inírida que kilómetros más adelante se une con el Guaviare y el Atabapo para formar con el Orinoco la estrella fluvial del sur.
Vegetación
Los bosques encontrados presentan características tales como: vegetación rica en número de especies, muy heterogéneas, formación alta y estratificada con variabilidad de diámetros, vegetación típica de carácter arbórea; abundancia de lianas (Igüanito, chirriador y zarza, pertenecientes a la familia Rubiaceae), bejucos de tallos gruesos y plantas epífitas (musgos, hepaticas y helechos), suelo cubierto de hojarasca y presencia de familias dominantes tales como Mimosaceae, Laureacea, Lecythidaceae y Cecropiaceae. El desarrollo de las especies herbacea y arbustiva es irregular, dependiendo de la cantidad de luz recibida a nivel del suelo. Las familias de sotobosque más representativas son: Melastomataceae, Aracaceae, Araceae, Bromeliaceae, Ciperaceae, zingiberaceae, entre otras.
Las especies forestales más aprovechadas en la jurisdicción del Municipio son: Aniba sp (Sasafrás), Qualea sp (Arenillo), Cedrelinga sp (Mure), Bocageopsis sp (Majagüillo), Virola sp (Carnevaca), Ocotea sp (Laurel). Algunos de los productos obtenidos y que son de mayor utilidad en la población son vigas, estantillos, tablas listones y bloques los cuales son utilizados para la construcción de viviendas, fabricación de muebles y canoas. Como complemento a esta actividad es utilizada las hojas de palma real (Attalea regia) y Moriche (Mauritia fluxuosa) las cuales son utilizadas para techar las viviendas.
En la mayoría del perímetro rural del Municipio de Inírida y alguna parte del perímetro urbano, se encuentra vegetación introducida, la cual se encuentra representada en pastos tales como Brachiaria decumbens y Brachiaria humidicola, cultivos de pancoger tales como maíz, yuca y plátano), además, durante los últimos años se ha venido manejando los sistemas agroforestales, donde se combinan especies frutales como el chontaduro (Bactris gasipaes), uva caimarona (Pouruma cecropiaeifolia), borojó (Borojoa patinoi), manaca (Euterpe precatoria), copoazú (Theobroma grandiflorum), anón (Rollinia sp) y arazá (Eugenia estipitata). Y algunos forestales tales como: Sasafrás (Aniba sp), Guayacán (Tabebuia roseae), cedro (Cedrela agustifolia), entre otros.
El bosque se encuentra distribuido en Bosque natural intervenido caracterizado por conservar algunas de las características del bosque primario y cuya intervención antropica ha sido de tipo selectivo, en esta predominan las familias Lauraceae, Lecythidaceae y Mimosaceae, en cuyos casos podemos encontrar algunas especies predominantes tales como pendare (Couma sp), laurel (Ocotea sp) y mure (Cedrelinga sp). Bosque Natural Altamente Intervenido se encuentra identificado en donde existen asentamientos humanos, puesto que es sometido a presiones de colonización, deforestación con quemas para el establecimiento de cultivos tradicionales agrícolas en huertas de pancoger y potreros; conservan la función de especies protectoras pero con deterioro de las características fisionomicas tales como fustes malformados, DAP mínimos, entre otros, las familias más sobresalientes son: Lecythidaceae, Mimiaceae y Fabaceae. En el Bosque de Galería se cuenta con especies características tales como las heliófitas (Heliconeas) y arbustos de las familias Melostomataceaes y Piperaceaes, entre otras.
El bosque de galería se encuentra ubicado en las márgenes de los caños afluentes de los ríos encontrados en la jurisdicción municipal. Además, se pueden observar vegetación arbustiva de porte bajo de origen secundario (rastrojo) que se regenera después de la desaparición del bosque natural, algunas de las especies predominantes son: Cecropia sp, Vismia sp, Brownea sp, Inga sp y Ochroma sp, entre otras.